Guitarra Raimundo 118

Lo primero que hay que decir de la Guitarra Raimundo 118 es que se trata de uno de los modelos de mejor relación calidad-precio que se pueden encontrar en las tiendas. El equipo de luthiers de Raimundo (catálogo completo aquí) ha hecho un trabajo a conciencia con la intención de poder proporcionar al público una guitarra que ofrece el mejor rendimiento, pero que se puede adquirir a un precio popular.

Su calidad de sonido se ve potenciada por el diseño del instrumento, el cual ha sido creado siguiendo las bases de la tradición española más clásica. Este método de fabricación encuentra su origen siglos atrás, pero lo que ha hecho Raimundo ha sido perfeccionarlo para lograr los mejores resultados según los estándares de calidad y sonido actuales.

Cuando sujetamos la guitarra notamos a primera vista su diseño tradicional. Se ha usado la técnica del tacón español, por la cual la caja de resonancia cubre parte del mástil. El motivo de haber sacado partido a este recurso es para proporcionar un mayor nivel de robustez a la guitarra, lo que mejora el sonido que emite, la durabilidad y la sensación que nos proporciona en las manos.

Características de la Raimundo 118

Como modelo de la serie estudio, esta firma española ha cuidado hasta el último detalle de la guitarra, tanto en su aspecto como en la calidad de los materiales usados para la fabricación. La tapa se puede elegir construida con una de dos opciones distintas de madera: pino o cedro. Son dos de las maderas más habituales y que mejores resultados proporcionan en una guitarra como esta que trata de ser competitiva en precio y, al mismo tiempo, de gran calidad sonora.

Para los aros y el fondo se ha utilizado sapelly tintado que le ayuda a dar un gran estilo al instrumento, mientras que el mástil es de samanguila. En el diapasón y el puente nos encontramos con palo santo, y para los perfiles y la sobrecabeza se ha utilizado madera de mansonia.

La acertada decisión de Raimundo de usar mansonia se ve reflejada en el uso de una guitarra muy ligera, cómoda, resistente y, al mismo tiempo, de gran durabilidad. Son características que buscaríamos en cualquier buen instrumento con el que queramos poder tocar durante años.